jueves 28 de marzo de 2024

El urdampilletense que viajó a siete mundiales desde 1994: “Sorprende el fanatismo por Argentina en el mundo”

El urdampilletense que viajó a siete mundiales desde 1994: “Sorprende el fanatismo por Argentina en el mundo”
lunes 12 de diciembre de 2022

Gustavo “Pirolo” Rodríguez es urdampilletense y llegó el miércoles pasado de Qatar, donde fue a alentar a la Selección Argentina. “Es accesible la posibilidad de ganar el campeonato”, afirmó en una charla que mantuvo con PRESENTE.

Su sobrenombre es un orgullo para él, lo heredó de su padre que falleció hace un mes. Justamente para acompañarlo puso en duda su viaje a Qatar. El que lleva su curso en el país de Medio Oriente es el séptimo Mundial de Fútbol al que asistió. Empezó su travesía con el de Estados Unidos, en 1994 y, salvo el de 2002, estuvo en todos hasta el actual.

Si bien es un apasionado del fútbol, también disfruta conocer lugares, recorrer y hacer turismo en los países donde se realiza la competencia más importante a nivel deportivo.

- ¿Hace cuánto empezaste a organizar el viaje?

- Más de un año. Fui con un amigo, compañero de la facultad, de Olavarría y con un primo, por parte de mi padre, de España. Los tres habíamos ido a Rusia en 2018 y andábamos en la gira. Desde España mi primo no encuentra amigos con quien ir a un Mundial y lo arrastramos nosotros.

Gustavo posa con su bandera en un partido del Mundial de Rusia, en 2018.

- ¿Fueron por su cuenta o a través de una empresa de viajes?

- Lo fuimos organizando nosotros y con algunas cosas nos ayudó María Alicia Rodríguez de Ankor Tour. Al primero que fui fue en el 94 y todavía no la conocía, ya me dio una mano y me organizó varias cosas en el 98. También hice otros con ella, cuando fui a Sudáfrica y a Alemania, siempre la consulto y a través de ella concreto determinadas cosas del viaje.

- ¿Entonces desde el 94 que vas a los Mundiales de Fútbol?

- No, en el medio falté al de 2002, no me daba el bolsillo en ese momento.

- ¿En alguno te quedaste hasta el final?

- El del 94 llegamos hasta donde llegó Argentina, que se cortó con el tema de Maradona. En el 98 también, fui hasta donde llegó la Selección que le ganamos en octavos por penales a los ingleses y perdimos con los holandeses en cuartos. En ese hubo una jugada que Orteguita le pegó un cabezazo al arquero y estaba para ganar Argentina. El de 2006 vi cuando eliminamos a México y no conseguí entradas para cuartos que fue con Alemania.

Siempre me encuentro con alguien de la zona. En el 94 me encontré con alguien de Urdampilleta que había ganado un concurso en el programa de Tinelli. En 2006 me encontré con “El Colo” Bautista.

A Sudáfrica fuimos con un grupo de 20 personas con el cual me volví a encontrar en algunos aeropuertos y otros lugares de Qatar. Fue una alegría después de 12 años. Quedó un grupo de WhatsApp y nos contactamos, con algunos me volví a ver en Rusia, pero ahora me encontré con más cantidad, porque es más chico y todo se concentraba en una sola zona, Doha.

- ¿Era gente de todo el país?

- Sí, todos argentinos, de Capital y de las provincias. Fue bueno porque vivimos 20 días juntos, pasamos la vida juntos esos días y nos conocimos más a fondo como personas. Fue una experiencia distinta a todas las demás por lo que implica Sudáfrica y lo complementamos con el tema del deporte.

“Pirolo” junto a sus amigos en el Mundial de Brasil.

- Siguiendo la cronología, quedamos en Brasil 2014

- Fui con mi amigo de Olavarría y un amigo de él que yo no conocía. Él se armó una motorhome y nos invitó, hicimos muchos kilómetros, como 10 mil en 20 días. El primer partido se jugó en Porto Alegre, después fuimos a Río y lo más arriba que llegamos siguiendo a Argentina fue a Brasilia.

Cuando empezamos a pegar la vuelta no conseguimos entrada para la final así que nos volvimos antes. La final la vimos por tele en Argentina.

En el '18 hicimos base en Moscú y San Petersburgo. Rusia más que un país parece un continente tenía, si no me equivoco, 9 husos horarios. En definitiva, con el tema de los viajes, está lo deportivo que es lo que moviliza, pero después es hacer turismo. Lo deportivo es una o dos veces por semana y después queda mucho tiempo para aprovechar para conocer.

Rusia fue un lugar sorprendente desde todo punto de vista, es un país que desde la época soviética, siempre ha sido muy cerrado, no está vendido al turismo y te encontrás con un Museo Hermitage en San Petersburgo que tiene obras que no le envidian nada al Museo del Louvre de París. Tuve la posibilidad de ir a un bunker de la época de la Guerra Fría que está a 60 metros bajo tierra y tiene toda una estructura de hormigón y de hierro. Allí se refugiaban los altos mandos en caso de que hubiera una guerra nuclear.

 “Un país increíble en el medio del desierto, que el dinero les sobra”

- Y el último, hasta el momento, Qatar

- Es un lugar extraño porque no tiene fútbol, tuvieron que correr el Mundial que normalmente se hace a mitad de año para que fuera invierno con temperaturas soportables para todos. Cuando volví me sorprendió porque en Buenos Aires hacía más calor que allá. En épocas de verano nos contaban que allá llegan a casi 50º, cuando estuve la máxima andaba en los 30º y la mínima se mantiene en 22º.

Me encontré con un país increíble en el medio del desierto, que el dinero les sobra. Todo estaba muy bien organizado, muy seguro, pero está el contraste al ser musulmanes que la mujer está marginada socialmente. Desde el punto de vista edilicio es impresionante porque tienen tanto dinero que sorprende. Salvo a uno, los subtes llegaban a todos los estadios y eso no ocurre en ningún lado del mundo.

- ¿Con el idioma cómo hacían?

- Nosotros hablamos algo de inglés, ellos también y no había grandes problemas. En general en Alemania, Sudáfrica y Rusia las generaciones jóvenes hablan inglés. También sirve el lenguaje de señas.

- En cuanto a lo futbolístico, ¿cómo viste a Argentina?

- Empezamos mal, el primer partido fue una sorpresa desagradable. En el primer tiempo estábamos jugando re bien, estábamos para hacer el segundo gol, nos anularon mal un gol. El segundo tiempo, en diez minutos nos hicieron dos goles y el equipo se cayó anímicamente, no se pudo empatar.

En Arabia Saudita decretaron feriado nacional, una cosa de locos. Hablé con un muchacho que tenía puesta la camiseta de Argentina, le hablé en castellano y me respondió, había vivido en España pero era de Arabia. Charlamos un poco y para ellos fue como ganar su Copa del Mundo porque ni lo soñaban.

Contra México en el primer tiempo Argentina tuvo la pelota pero no profundizaba. En el segundo tiempo se hizo un gol rápido, se empezó a abrir el partido y a recuperar la memoria de como venía jugando anteriormente el equipo.

Contra Polonia ellos no atacaban y era llamativo. Yo no me había dado cuenta que aun perdiendo por dos goles, clasificaban y eso fue lo que ocurrió. Por ahí ellos tenían miedo porque Argentina empezó a jugar tan bien, hicieran un tercer gol y ahí corrían riesgo de quedar afuera.

Contra Australia podríamos haber hecho un par de goles más, íbamos 2 a 0 y se pusieron 2 a 1 con un gol en contra. A lo último nos podrían haber empatado, una atajada se mandó el arquero “Dibu”. Podríamos haber hecho dos o tres goles más y ellos podrían haber empatado, pero en ningún momento vi riesgo de que Australia gane el partido porque estaba muy controlado todo.

Con Holanda íbamos 2 a 0 cómodos y en el último minuto empatan. Fue el más complicado de todos porque ir a penales es una lotería. En definitiva, el balance que hago es que Argentina, como le pasó a Brasil en el mismo día, tendría que haber ganado en los 90 minutos contra Croacia. El fútbol es así, tiene esas situaciones y es lo que lo hace apasionante.

- ¿A las entradas las tenías antes de llegar a Qatar?

- En algunos fui con entrada y en otros fui a reventa. En este caso había podido comprar algunas por la página FIFA donde había muchas opciones pero no es fácil. De Argentina tenía el primero y el tercero, o sea contra Arabia y contra Polonia, los otros dos compré de reventa. Después había podido comprar por FIFA Uruguay - Portugal que fue un lindo partido y Uruguay - Ghana que ganó Uruguay 2 a 0 pero se quedó a fuera por diferencia de gol. También fui a Inglaterra – Gales y un partido que me gustó mucho fue Alemania – España.

Eso fue muy extraño porque en ningún otro mundial lo pude hacer pero Qatar, como los estadios estaban tan cercanos, permitía eso. También pasó que se podían conseguir entradas de reventa no tan caras porque Europa un poco le dio la espalda al Mundial. Se hablaba que algunos países como Alemania le daba la espalda por el tema de derechos humanos que es una realidad. Al no acompañar tanto Francia, España, Alemania y Holanda, había más posibilidades de conseguir entradas.

- ¿Fue fácil contactar a las personas que tenían para vender?       

- Sí porque te metés en grupos de WhatsApp o vas a la cancha y encontrás gente que te ofrece entradas. No es tan difícil contactarlas.

- ¿Te hubiese gustado quedarte más tiempo allá?

- Sí, pero en el caso nuestro aprovechamos a hacer turismo y en Qatar tenés algunas cosas para descubrir pero no son tantas. Nos fuimos 10 días antes a Egipto, hicimos un recorrido muy interesante por El Cairo, las pirámides, el museo donde está la tumba de Tutankamón.

También hicimos un crucero muy lindo a través del Nilo, fuimos hasta Sudán casi, el límite sur de Egipto. Lo disfrutamos mucho porque fuimos a Luxor donde hay muchos templos, monumentos, el Valle de los Reyes y las Reinas e hicimos un viajecito en globo. Más al sur están los pueblos Nubios que siempre han pertenecido a Egipto pero han estado marginados. Ahí el Nilo no está tan contaminado y nos pudimos meter y nadar.

Después fuimos a Qatar donde estuvimos 15 días y con los viajes estuvimos prácticamente un mes. Se nos escapaba de presupuesto quedarnos, aunque nos hubiese gustado seguir a Argentina hasta la final si Dios quiere, es lo que esperamos.

Por el tema laboral lo conozco a José Erreca, sabíamos que estábamos, nos escribimos mensajes pero en los partidos de Argentina no nos encontrábamos. Recién contra Australia fui más temprano y logramos encontramos, nos sacamos una foto y estuvimos charlando. Le dije que como venía Argentina se tiene que quedar hasta el final y espero que se quede él como representante de la zona.

- ¿Sos cabulero?

- No, no, pero en este Mundial conseguimos cuando compramos la entrada contra Polonia, una zona vip y nos daban una especie de cintita. No soy de cábalas pero a esta me la he dejado, hasta donde llegue Argentina la voy a usar de cábala en la muñeca, es la única cosa que tengo.

- ¿La bandera que dice Urdampilleta, desde cuándo la tenés?

- Desde el 94, hace 28 años. Hicimos dos con mi amigo que hicimos el primer viaje, él tenía una más grande que en el primero o segundo partido se la robaron. La bandera mía como es más chica se salvó y ha sobrevivido a todos los Mundiales. También la llevé a algunos Juegos Olímpicos, fui a Londres y a Brasil.

La madre de este amigo me dio la idea de escribir un diario y lo hago en cada viaje. Es algo que conservo para acordarme con el paso del tiempo. En Qatar escribía a la noche cuando no estaba muy cansado y si pasaban un par de días me hacía un hueco porque después me olvidaba. A los diarios los guardo con las entradas, también me gusta el tenis y he ido a ver partidos de Roland Garros y Wimbledon.

- ¿Cómo ves a Argentina en adelante?

- Francia creo que es el más candidato, después debemos venir nosotros. Todos los que llegan son de respetar, por algo llegaron a esa instancia. No lo veo imposible, es accesible la posibilidad de ganar el campeonato. Sobre todo después de los últimos partidos que veo que el equipo recuperó la memoria y ha vuelto a jugar bien que es lo que a uno lo entusiasma.

- Nos volvimos a ilusionar dice la canción que más se escucha en la cancha…

- Esa fue otra sorpresa. En Brasil estaba el  “Brasil, decime qué se siente...”, que lo había escuchado alguna vez antes de ir pero estando allá se transformó en un himno. Ahora el tema de La Mosca es muy contagioso y se transformó en lo que canta la hinchada, es maravilloso. Está muy bueno porque habla de Diego, de la gente de Malvinas y por mi generación me toca mucho, la letra está buena.

“Sorprende el fanatismo que tienen por Argentina en el mundo”

- ¿Es verdad que Argentina es uno de los equipos que tiene más hinchada de gente que no es del país?

- Sí, sin dudas. Dentro del mundo árabe hay muchos qataries que por Messi o por lo que sea están con la camiseta de Argentina. Otra sorpresa es que charlé con hindúes, gente de Asia y del Sudoeste Asiático que son muy hinchas, en la zona de Bangladesh es increíble, me contaron que había periodistas que hacían el programa con la camiseta de Argentina puesta.

La Selección tendría que ir a jugar un partido ahí gratuito por el acompañamiento que le hacen. Sorprende el fanatismo que tienen por Argentina en el mundo.

- ¿Se veían barras a las salidas de los estadios, como en Argentina?           

- México es muy ruidoso, en este caso por suerte no bebían porque no había venta de alcohol. Había hinchadas que por ahí se ponían un poco pesadas pero los que son bravos son los ingleses y un poco los alemanes, como no había gran cantidad y al estar restringido el alcohol, la violencia estaba acotada respecto a otros lugares.

- ¿Había personal de seguridad?

- Sí, mucha seguridad, la gente allá es muy respetuosa, honesta. También son muy serviciales y había buses y metros gratis con la famosa tarjeta Hayya Card que presentándola andabas para todos lados y abarataba el transporte.

También había buses exclusivos del Mundial que nos llevaban al aeropuerto, a los estadios y a determinadas playas gratis. Tengo gente conocida que tuvo un problema digestivo menor y fueron a centros de salud donde los atendieron y les dieron la medicación gratuita. Había toda una red de contención para el extranjero que era espectacular.

Estábamos en una zona un poco alejada del centro de Doha y el gobernador ofrecía combis todos los días de forma gratuita para hacer paseos de tres horas. Fue algo que nos llamó la atención porque no lo habíamos visto nunca.

- Desde Qatar vieron la oportunidad de darse a conocer al mundo…

- Exacto. Este Mundial en el fondo destapó algunos de los negociados de la FIFA porque es en una época del año donde no han hecho nunca y sin tradición futbolística, había algo raro que después lo terminaron destapando. Creo que lo hacen para conocerse en el mundo como lo hizo Rusia en su momento.

- ¿Y en cuanto a las comidas?

- Nos arreglábamos porque había cosas de mar, mariscos y también pollo, cordero, pastas y pizzas. Yo no investigué demasiado, soy más tradicional. Los costos había para todos los bolsillos, había lugares lujosos y otros más accesibles. Eso también me sorprendió porque pensé que iba a ser más caro.

- ¿El alojamiento también era accesible?

- Nosotros fuimos a uno que tenía FIFA y había también para todos los bolsillos. Había cruceros muy lujosos que estaban amarrados en la zona del puerto y después había lugares de otro costo, valores que son normales en Europa. Otra oportunidad era alquilar departamentos que no era tan sencillo pero se ubicaban de 4 a 6 personas y era barato.
En todos estos eventos los precios de los alojamientos se duplican o triplican, es un clásico.

La Hayya Card es una especie de visa, si no la tenías no podía entrar al país en este momento y para gestionarla tenías que tener por lo menos una entrada para un partido comprada a FIFA y alojamiento. Yo la pedí digital y después la imprimí, en el aeropuerto me agilizó algunos trámites. La tarjeta era una especie de control porque también pedían que presentemos el pasaje de vuelta. Tomaban sus precauciones pero al llegar al aeropuerto estaban muy predispuestos para atenderte y había mucha gente al servicio de uno para solucionar el problema que tengas.

¿Y todos ellos eran solo hombres?

- Sí, en las cadenas de empresas, todo lo que internacional, había mujeres y la atención era mixta. Lo que dependía exclusivamente de ellos era un patriarcado y los varones manejaban todo.

“Quien tiene la idea de viajar siempre encuentra una excusa”

- ¿Cuándo empezás a organizar el de 2026?

- (Risas) Ya estamos cada vez más grandes pero tenemos la idea, ya lo hablamos. Considero que para viajar hay una cuestión de dinero, pero no es la decisiva. La cuestión es tener la predisposición y la actitud, después sí vas juntando dinero. Quien tiene la idea de viajar siempre encuentra una excusa y el que no quiere viajar, encuentra una excusa para no hacerlo. Yo estoy del lado que encontramos siempre una excusa para viajar.

- Y más allá de lo deportivo, también te gusta conocer el lugar, su historia…

- Sí, en este caso estaba todo muy concentrado, pero en otros lugares como Francia, Alemania y Rusia hay mucha historia para ver. Recuerdo que en Francia justo había carreras de Fórmula 1 y no fui por un tema de dinero pero me hubiera gustado ir. En Qatar había carreras de camellos y de caballos y los cuidan mucho.

Me interesan mucho los museos o exposiciones. Me gusta mucho Van Gogh y en 2008 fui al lugar donde él pasó los últimos 30 o 40 días de su vida donde estaba psicológicamente mal y se termina suicidando, es un pueblito que está a 50 kilómetros de París y se llama Auvers.

Melina Gómez

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